Reino de Catalunya


Conde Ramón Berenguer II

Ramón Berenguer II
Nombre: Ramón Berenguer II
Sobrenombre: Cabeza de estopa
Reinado: 1076-1082
Padre: Ramón Berenguer I
Madre: Almodis de la Marca
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Ramón Berenguer II, conocido como el Cabeza de Estopa por su espesa cabellera, fue conde de Barcelona entre 1076 y 1082. Era hijo de Ramón Berenguer I y de Almodis de la Marca y hermano, probablemente mellizo, de Berenguer Ramón II.

El testamento de su padre establecía que Ramón Berenguer y su hermano debían gobernar en igualdad de condiciones aunque en realidad existían ciertos privilegios en favor del conde Cabeza de Estopa. En un momento determinado, Ramón Berenguer se vio obligado a repartir sus territorios con su hermano, reparto que prometió ante los obispos de Barcelona y Gerona, los condes de estos condados y el vizconde de Cardona.

En el 1078, Ramón Berenguer entregó a su hermano como garantía del reparto las paerias de Lérida y al rey musulmán de esta ciudad. Barcelona, Urgel y Lérida luchaban contra Zaragoza con lo que el peligro musulmán retrocedió, tanto por la zona leridana como por la colonización cristiana que llegaba hasta Torregrossa. En el 1079, la Conca de Barberá estaba ya repoblada por cristianos.

A finales del 1077, el Papa Gregorio VII envió a Girona su legado, Amat de Olorón, para dar impulso a sus ideas de reforma de la iglesia. Es posible que Amat aprovechara su estancia en la ciudad para intentar que Ramón Berenguer y su hermano se reconciliaran, ya que su padre había dejado bajo tutela papal a su hijos en su testamento. En el 1079, el Pontífice escribió al obispo de Gerona solicitando que mediara entre los dos hermanos para poner fin a las disputas condales, conjuntamente con los abades de Ripoll, Sant Cugat del Vallés y Sant Ponç de Tomeres.

Ese mismo año, Ramón y Berenguer se reparten la ciudad de Barcelona, Castellvell y su marca, Olèrdola, Vilafranca del Penedés, Vallmoll, Benviure, Gavá, Pallejá y otros dominios. Ambos hermanos convinieron residir de forma alternativa durante seis meses en el palacio condal. Las funciones soberanas quedaron indivisas, así como las rentas por juicios, mercados, moneda y unos patios en Barcelona.

Sin embargo, Berenguer siguió reclamando y en el 1080 obtuvo de su hermano la mitad del castillo de Barbera, del de la Bleda y de los condados de Carcasona y Rasés. Ramón se comprometió a compartir todas las futuras adquisiciones, incluyendo las naves que se construyeran y las que se compraran.

Acordaron también que la expedición prevista para el siguiente verano la realizarían conjuntamente. Finalmente esta expedición no se llevó a cabo, seguramente por los cambios que habían sufrido los reinos de taifa. Con ocasión de la preparación de esta empresa, el Cid, enemistado con su rey Alfonso VI de Castilla, se trasladó a Barcelona y ofreció su colaboración, que no fue aceptada; acto seguido, quedó al servicio del rey Al-Muqtadir y de su hijo Al-Mutamán, reyes de la taifa de Zaragoza, mientras que el rey de Lérida se apoyaba en los navarros primero y en los condes de Barcelona después. Esto enfrentó a Berenguer Ramón con el Cid cerca de Almenar en el verano de 1082. Berenguer fue derrotado y hecho prisionero siendo liberado poco tiempo después, a cambio, seguramente, de un importante rescate.

El 5 de diciembre de ese mismo año, Ramón Berenguer se dirigía a Barcelona atravesando el bosque de Perxa del Astor en el Montnegre. Unos desconocidos, tal vez sus propios acompañantes, le asesinaron en ese bosque. Su cadaver fue trasladado a Gerona donde recibió sepultura. Su hermano fue acusado de este asesinato por lo que recibió el apodo "del Fraticida".

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